La eritrosedimentación (VSG) mide la velocidad a la que los glóbulos rojos se depositan en un tubo de ensayo, un factor de la concentración de fibrinógeno en la sangre, que aumenta durante la inflamación. La VSG es una medida indirecta e imperfecta de la respuesta inflamatoria y puede verse afectada por múltiples procesos además de una respuesta de fase aguda, incluidas afecciones hematológicas, obesidad, insuficiencia renal, insuficiencia cardÃaca, envejecimiento, sexo femenino, embarazo y medicamentos.
La proteÃna C reactiva (PCR) es producida por el hÃgado en respuesta a una infección o inflamación aguda y desempeña un papel en la muerte celular y la apoptosis. Por lo tanto, la PCR es una medida más directa de la respuesta inflamatoria, pero también puede verse afectada por muchos otros procesos, incluidos la edad, el sexo, la raza y el Ãndice de masa corporal.
Aunque la VSG y la PCR son biomarcadores de inflamación, la interpretación de su aumento en la inflamación aguda es diferente, ya que los patrones de respuesta son diferentes para cada prueba.
La PCR comienza a aumentar a las pocas horas del inicio de una infección o afección inflamatoria, tiene una vida media constante de aproximadamente 18 horas y volverá a los niveles normales en 3 a 7 dÃas desde la resolución del proceso subyacente.
Por el contrario, los niveles de VSG aumentan más lentamente en respuesta a la inflamación y la infección y permanecerán elevados durante más tiempo mientras permanezca un exceso de fibrinógeno en el suero.
Como resultado, la PCR es un marcador más sensible de la respuesta inflamatoria aguda, especialmente durante los primeros dÃas de un proceso.
Utilidad clÃnica
Las elevaciones en la VSG y la PCR indican que hay inflamación, pero las pruebas y los niveles no especifican dónde. Además, las elevaciones de los niveles, especialmente un aumento rápido de la PCR, se producen en un amplio espectro de trastornos y enfermedades que incluyen infecciones, traumatismos, necrosis tisular, neoplasias malignas y trastornos autoinmunes.
La VSG y la PCR no son sensibles ni especÃficas de ninguna afección y solo deben usarse junto con una buena historia clÃnica y un examen fÃsico. Aun asÃ, estos parámetros de laboratorio continúan sirviendo como un complemento importante en el diagnóstico, seguimiento y manejo clÃnico de afecciones inflamatorias agudas y crónicas.
Las mejores prácticas aconsejan no solicitar de forma rutinaria una VSG para evaluar la inflamación en un paciente indiferenciado y, en su lugar, solicitar una PCR cuando se evalúa la inflamación aguda. Esto se debe a que la PCR estará elevada en los primeros dÃas de una respuesta inflamatoria aguda, lo que la hará más sensible y especÃfica durante esta fase en comparación con la VSG, que puede ser normal en este momento. Después de la resolución de una fuente inflamatoria conocida, la VSG puede permanecer elevada y puede ser útil mantener la tendencia durante dÃas, mientras que la PCR volverá a la normalidad más rápidamente.
Estas tendencias temporales en las concentraciones de PCR y VSG pueden ayudar a dilucidar el momento y la naturaleza de un proceso inflamatorio. Por ejemplo, un paciente con PCR elevada y VSG normal probablemente tenga presente un proceso infeccioso, isquémico o tromboembólico agudo. Por otro lado, un paciente con PCR normal y VSG elevada probablemente tendrÃa un proceso autoinmune, inflamatorio sistémico o maligno más subagudo o crónico. Esta es la razón por la que, en general, la VSG es más útil para controlar las enfermedades inflamatorias crónicas, mientras que la PCR tiene una mayor utilidad en el control y diagnóstico de las enfermedades inflamatorias agudas.
En particular, en la práctica, la combinación de la interpretación de VSG y PCR da como resultado una mayor precisión y utilidad diagnóstica. Esta es la razón por la cual ambas pruebas generalmente se ordenan simultáneamente, aunque sus picos teóricamente aparecen en diferentes momentos durante la respuesta de fase aguda y se pueden presentar algunos argumentos para su uso individual.
Valores normales
Si bien los reactivos de fase aguda, como la VSG y la PCR, no son especÃficos de la enfermedad ni pueden distinguir de manera consistente un proceso inflamatorio agudo de uno crónico, tienen utilidad en ciertos entornos de urgencias. Los valores normales de VSG y PCR se enumeran a continuación, y es importante señalar que los aumentos mÃnimos de VSG y PCR son menos útiles que los aumentos mayores.