Cada año, la tuberculosis (TB) afecta a millones de personas en el mundo, generando un efecto devastador en las comunidades. A pesar de ser prevenible y curable, continúa siendo una de las enfermedades infecciosas más mortales del mundo.
Este año, el Día Mundial de la Tuberculosis resalta la urgencia de la acción. Los países se han comprometido a acelerar la respuesta y garantizar el acceso universal a la prevención, el diagnóstico y el tratamiento. Sin embargo, el progreso es insuficiente, y la TB sigue afectando a las poblaciones en situación de vulnerabilidad.
A pesar de los desafíos, hay razones para la esperanza. Nuevas tecnologías e innovaciones pueden cambiar el rumbo de la TB:
- radiología digital con lectura asistida por inteligencia artificial es una poderosa tecnología para aumentar la detección temprana en poblaciones en mayor situación de vulnerabilidad y en zonas más afectadas
- pruebas moleculares rápidas para el diagnóstico oportuno
- tratamientos más cortos y totalmente orales, con soporte de la telemedicina.
Con un compromiso renovado y la colaboración de todos, podemos avanzar significativamente hacia el fin de la tuberculosis y salvar vidas. Es el momento de actuar con determinación para avanzar hacia las metas de eliminación.
Actúa ahora. Invierte ahora. ¡Cumple ahora!
Juntos, sí podemos poner fin a la TB.